Educar en casa en Madrid es un no parar.
El año pasado nos lo tomamos con mucha calma, porque acabábamos de llegar. Nos dedicamos a conocer la ciudad, hacer excursiones y, sobre todo, conocer gente. Empezamos a hacer un encuentro semanal en un parque para que los niños jugaran libremente mientras las madres nos dedicábamos a socializar.
Este curso empieza fuerte. Seguimos con el encuentro semanal y, además, hemos creado un Club de Lectura y un Grupo de Proyectos. Para el Club de Lectura estamos leyendo el libro "Cuentos para jugar" de Gianni Rodari (o, en nuestro caso, re-leyendo). Para el Grupo de Proyectos, cuya primera reunión será a final de este mes, estamos estudiando las estrellas (pst, homeschoolers madrileños, no nos copiéis la idea, a poder ser...).
A todo eso hay que añadirle el Comezine semanal de las tiendas Fnac: película y merienda gratis. Y muchas otras actividades esporádicas. Si Damián supiera inglés tal vez nos apuntaríamos también al Club de historia, pero de momento no hay nivel suficiente. Aunque bastante trabajo tiene con todas estas actividades y con su nuevo blog.
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